Foto de Marta Ramos |
Hace más de cuarenta y ocho horas que
llevo el pecho apretado
como si fuera un papel estrujado
listo para la basura.
La noticia que todos susurran
una muerte que nadie entiende
el haberte ido sin despedida
sin un chiste pesado
ni una risa irónica
nos ha dejado a medias
esperando algo del amigo que conocíamos.
El proyector que opera en mi mente
no ha parado de lanzar imágenes
momentos de otros días
cuando reíamos sobre los tontos de turno.
Tu imagen de gladiador
siempre a la carga para salvar a los amigos
no deja de ocupar mis pensamientos
todas esas tardes que acompañaste
que le diste vida a nuestra poeta
aquella confesión
que aunque no creías en los dioses
habías pedido… exigido que la salvaran.
Eras severo cuando de poesía se hablaba
intolerante estricto inflexible
un sacerdote de la palabra
receloso de tus retoños.
¿Recuerdas la otra noche?
Cuántos consejos me diste!
Tus palabras nadan en este mar
en mi mente sobrecargada
de tanta información a la vez por procesar.
Al despedirnos te dije…
que tú siempre estabas ahí
listo para apoyarme en todo.
No se qué pasó por tu mente
qué oscura profundidad
dio albergue a la razón
el rumbo que tomaste
ese impulso que no pudiste
convertir en verso.
Manuel A. López
4 comments:
graciaa, manny, hemano, por traducirlo asi...todo alivia. un abrazo grande...
Sí... "el impulso que no pudiste convertir en verso"... nos dejó la opción de que fuéramos nosotros quienes lo escribiéramos...
Ya cuantos amigos nos esperan del otro lado? tantos! pero tu tenias que quedarte un poco mas para darnos apoyo, afecto.
No es justo Heriberto, esa huida tan rapida...no es justo, tu nos hacias falta a todos, tu eras el mas fuerte.
A.B.
Todavia procesando el dolor, apenas puedo comentar... Gracias Manny, por expresarlo, tan exacto, tan presiso, tan profundo. Yo le dije muchas veces y hoy le repito... No me alcanzara la vida para agradecerle por tanto apoyo!!!
C.M
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